CARTA A NEBOT

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NOTA: En vista de que algunas personas han creído adecuado compartir este post en redes sociales, les pido tomar en cuenta de que se trata de un texto publicado hace más de 5 años. Saquen sus propias conclusiones al respecto de que este texto parezca escrito el 14 de junio del 2015.  Gracias 

Señor Abogado

Jaime Nebot Saadi

I. Municipio del Cantón Guayaquil,

De mis consideraciones,

Don Jaime, no joda.

Es verdad que debe ser unas setecientas mil veces mejor alcalde de lo que fue Poquito Moncayo, pero igualmente le digo que no joda.

¿Porqué le digo que no joda?  Porque escribir palabras coloradas, así como carajear desde lejos es facilito, así como yo lo estoy haciendo ahora.  Lamentablemente yo también tengo el defecto de insultar, con la ventaja de que yo no soy nadie, es decir, nunca he ganado una elección en mi vida, cosa que en el Ecuador posiblemente puede ser algo que hable bien de uno.  Pero usted es el alcalde de la ciudad más grande del País y su responsabilidad es más vasta que la marcha que en Guayaquil unió a los que odian a Correa (no los que necesariamente lo aman a usted). 

Debo reconocer que mirar la última convocatoria suya fue impactante. Pero pasan los días y la falta de historia que lo sustente con coherencia  a usted hacen de ese impacto una anécdota más de este país digno de periódicos amarillistas.

Don Jaime, yo hasta votaría por usted si tuviera el verdadero valor de admitir que por partidos mafiosos como el Social Cristiano es que tenemos el Presidente que tenemos ahora. Recuerde que tuvieron el poder. Recuerde que tenían Cortes, Congresos y uno que otro presidente cobarde que iba al Cortijo para besar el anillo y asegurarse de que no sería perseguido el resto de sus días. ¿Cuántos presidentitos se ponían guayabera para recibir su espaldarazo? Hasta el inicialmente rebelde Lucio se puso guayabera, solo que parecía heladero.

¿Qué hicieron por el país los de su equipo? ¿O es que somos un pueblo de imbéciles que habiendo sido gobernados con honradez y sapiencia por tipos como usted es que decidimos un día firmarle un cheque en blanco al jovenazo que prometió desaparecerlos a todos  de la faz de la tierra?

Reconozca que le debe enojar ya no poder hacer llamar a sus asesores a ordenar a los Ministros de Economía para agilitar lo que sea que usted necesitaba. ¿Cuántos Ministros se comió usted con un solo maullido?  A nuestra Mercedes Sosa de las Finanzas usted no se la pudo comer (bueno nadie podría), y eso le cabrea, ¿o no? Eso no es democracia abogado. Acá no hay democracia. Y parte de la culpa es de usted y su grupo.

Todos los defectos de Correa los tiene usted. Mejor dicho, aquellos defectos que se le notan cuando gobierna, los tiene usted. Puteador, mandón, dueño de la verdad, puntero en sus respectivas encuestas y elecciones.  Censurador incluso pues recuerde que en su administración municipal se quiso censurar una famoso foto de León con pistola al cinto en el Congreso en una exposición de fotografía periodística  en el Malecón, porque dizque le dañaría su imagen de reconstructor.  ¿No fue usted uno de los que persiguió  al irreverente periodista  Pancho Jaime?

No joda señor alcalde, lo de ustedes es una pelea por el poder, no es por amor a la Patria. Es por unos puerco millones con los cuales usted no podrá convertir a Guayaquil en una ciudad realmente justa y tranquila.  Es por el poder, el poder que el sector al que usted representa perdió por sus enormes defectos y suciedades.  Le juro que no le creo si me dice que es por otra cosa.

Yo no lo quisiera a usted de Presidente la verdad.  Entre muchas razones porque irónicamente usted sería la consecuencia de Correa, así como él es la de ustedes. Esto ocurre porque acá ganan lo que consiguen sumar el odio, nunca los que realmente juntan un sentimiento positivo.  Y de consecuencia en consecuencia es lo mismo que de tumbo en tumbo.

Pero hasta votaría por usted si fuera capaz de explicar qué CARAJOOOO mismo es la AUTONOMIA que tanto cacarea.  Es que a mi no me salen los números. Le explico:   Guayaquil tiene en su presupuesto como ingresos propios solo el 24 por ciento más o menos. El resto es plata de papá estado o de créditos internacionales obtenidos con el aval de papá estado. Entonces me pregunto si en su AUTONOMÍA usted ya no querrá nada del papá estado?  ¿O será como el típico cachorro (para que me entienda) que se larga a vivir solo pero se lleva la tarjeta de crédito del taita y le lleva la ropa sucia a la mamita para que se la lave?  Es que administrar como a uno le da la gana la plata que no es de uno es chévere. 

 Por su lado Quito tiene de su presupuesto un 40 y pico por ciento de ingreso propio. Y en el 2008 Guayaquil recibió casi el doble del Gobierno Central que la capital. De esto no me quejo mucho porque bastante debe influir que la capacidad de ejecución suya fue siempre muy superior a la del General en su Aeropuerto.  Pero vea que hablar así nomás de AUTONOMIA no es coherente para alguien que no podría invertir lo que invierte en obras financiándolas por su cuenta. Y si me dice que AUTONOMIA es que a cada ciudad  le devuelvan lo que aporta al Estado, debo recordarle que mientras Pichincha paga en impuestos algo así como el 48,5%, Guayas se cayó con un 30,4% del total de impuestos nacionales. Y ojo que no le puse las petroleras.

Por cierto, a usted nunca le escucho en sus discurzasos algo así como: “Guayaquileños de mi corazón....paguen todos sus impuestos CARAJOOOO”. A usted nunca le veo luchar por erradicar al MPD de la educación pública que a la postre es mil veces más grave y dañino para el Ecuador que decidir quién es el macho que administrará la Isla Santay.

Hablando de Quito, a mí si me cabrea CARAJOOOO, que se la pinte como una ciudad de burócratas vagos que vive a expensas de las rentas del Estado y que no produce nada.  Y esta idea viene desde décadas atrás.  No es nuestra culpa que mientras en Guayaquil saqueaban los Bucaranes, nosotros teníamos a Don Rodrigo Paz, por ejemplo. Y no se olvide que el Malecón se financió con una ley que le sacaba sus centavitos a toda la República (qué lindo era ser el dueño del Congreso no?).   Debo admitir su experiencia política y su capacidad de administración. Esa movida de no lanzarse a la reelección si ganaba el SI en Guayaquil fue de alta estrategia. Y Guayaquil  evidentemente tiene un gran  alcalde y comparado con Paquito –el amigo de Abdalá-,  es un súper magnífico alcalde. Y parecería que al Barrera también le va a dar largo. Pero eso nomás abogado.

¿Se acuerda de su paso por el Congreso? ¿Esa memorable insultada con promesa de golden shower incluida y NI UN SOLO PUÑETE?  El único que rodó por los aires fue un pobre chapita de la escolta legislativa.  Al odioso del  Enrique Ayala Mora (al que  tildó de socialista de frack y tabaco inglés, y de COJUDO)  usted le amenazó con abofetearlo. Sigo esperando abogado. Si usted le daba en la jeta yo votaba por usted y hasta ponía plata en su campaña. Pero no lo hizo. Fue pura amenaza.  ¿Si ve cómo las intimidaciones y los insultos desde lejitos a la larga no son valoradas por el ecuatoriano común y corriente?

No le dio el bofetón ni a él ni al resto de “enemigos socialistas”. Con el tiempo hasta pactaron. La pelea de su sector con el otro sector fue siempre una continua danza de  espadachines con espadas sin viagra. Siempre un “agárrame que lo mato”. Siempre un duelo con balas de salva. Siempre una mariconada en la que nadie acabó con nadie porque siempre arreglaron bajo la mesa el reparto del botín.

¿Con qué cara se queja ahora? ¿Realmente se está quejando?

¿Tendría usted la “solvencia testicular” para reconocer su parte de culpa en el presente ecuatoriano del que tanto reniega?

Atentamente,

Impuestos, fútbol y libertad,

Rafael Lugo Naranjo